- 1 taza de café de aceite.
- 5 cucharadas soperas bien colmadas de harina.
- El cuarto de un pollo cocinado. (cocido, asado o frito).
- 1 cebolla.
- 700 ml. de leche, mejor entera, aunque también las puedes preparar con leche desnatada.
- 1 cucharadita de café de sal.
- pimienta negra molida
- 2 huevos.
- 1 taza grande de pan rallado.
Os dejo aquí unos links de la historia de las croquetas:
Elaboración:
Picar la cebolla y sofreirla.
Desmenuzar el pollo y cuando esté pochada la cebolla añadir a la sartén y salpimentar.
A continuación poner las 5 cucharadas grandes de harina y mezclarlo todo bien, (se os hará una pasta muy espesa, tiene que ser así).
Cuando lo tengáis todo bien mezclado añadir la mitad de la leche y con una cuchara de madera mover con energía haciendo círculos en la sartén.
Cuando esté bien compacto añadir el resto de la leche repitiendo la misma operación.
Hay que estar como unos 8 minutos dando vueltas a la masa.
Cuando veas que la masa se separa bien de el fondo de la sartén según la vas moviendo, la tendrás lista.
A continuación poner la masa en una fuente y déjala reposar como mínimo 3 horas, si la tienes de un día para otro mejor.
Para liar las croquetas prepara un plato bien grande con el pan rallado, y otro con los 2 huevos que tendremos bien batidos.
Con una cuchara de sopa ve separando pequeñas porciones.
Ir poniendo estas porciones en el plato con el huevo rebozándolas bien por todas partes.
A continuación pasarlas por el plato del pan rallado.
Cuando tengáis hecha esta operación ir colocándolas en una fuente.
Preparar una sartén no muy grande con abundante aceite, como una taza grande, lo suficiente para que cubra por la mitad la croqueta.
El aceite, en este caso, tiene que estar bastante caliente.
Ir dando la vuelta según las veas que se ponen doradas, no tardan casi nada en freírse, ten en cuenta para hacerlo más o menos rápido, si no se te quemarán.
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